Jueves, 26 Enero 2012 10:56

Buque varado: liberan de a poco la hidrovía

Las tareas para desencallar el buque varado hace más de una semana a la altura de Fighiera tuvieron avances pero los puertos de la región permanecen bloqueados. Ayer sólo pudieron pasar tres naves sin carga.

El buque que se encuentra encallado desde hace ocho días en el río Paraná a la altura de la localidad de Fighiera continuaba hasta última hora de ayer inmóvil, varado en el lugar. Al cierre de esta edición, las embarcaciones que están realizando las tareas de “salvataje” del gran Aristeas P, de origen africano, terminaban de realizar el trasbordo de granos para alivianar la carga, para así poder mover la nave y trasladarla a un puerto cercano, desbloqueando el canal para otras naves que están impedidas de pasar. En tanto, ayer sólo pudieron atravesar la zona tres embarcaciones de muy bajo calado (sin ningún tipo de carga), mientras que la posibilidad de darle paso a más naves estaba en manos dela Prefectura Naval.En el transcurso de la jornada de hoy y con nuevos resultados de otra batimetría –estudio de profundidad– en mano, desde la fuerza de costas decidirán los pasos a seguir

En contacto con este medio, fuentes afirmaron que al cierre de esta edición las embarcaciones que están realizando las tareas de “salvataje” del Aristeas P terminaban de realizar el traspaso de unas 2.500 toneladas de granos de ese buque a diferentes barcazas. El objetivo del “alije” –ése es el término técnico de la tarea– es alivianar el peso del buque encallado, para que recupere poder de flotación. Luego de ese trabajo –era la esperanza– la nave podría ser trasladada a la zona de San Pedro o Ramallo, donde la profundidad del río es mayor. Especialistas estimaban que “con suerte” eso podría llegar a suceder hoy mismo.

En tanto, en la jornada de ayer sólo pudieron “subir” a algunos puertos de la región, traspasando la virtual barrera fluvial, tres embarcaciones. Eso se dio luego de que desde la última hora del martes hasta ayer, una draga estuviera trabajando limpiando la zona y retirando arena del fondo. Tras el dragado, los tres buques fueron autorizados a pasar y monitoreados a modo de prueba por Prefectura. Tenían corriente a favor: al estar sin carga tenían muy bajo calado, unos5,20 metrosbajo la superficie, lo que les dio una ventaja clave. Un buque comercial de porte medio posee un calado de9 metros.

En tanto, si el Aristeas P pudiera moverse, ya en la jornada de hoyla Prefecturapodría autorizar a más buques a franquear el paso Paraguayo sin remolcadores, a excepción de los buques de mayor calado, que deberán seguir esperando. Esa fuerza es la que deberá organizar de ahora en más el programa de los buques que ya están cargados y esperan poder salir o los que están vacíos a la espera de ingresar a los puertos de la región. Igualmente, la cuestión no sólo dependerá de lo que suceda con el buque encallado, ya que también deberá realizarse una nueva batimetría en un escenario de pronunciada bajante del Paraná. La misma sirve, dicho a grandes rasgos, para medir en qué niveles queda la profundidad del río en la zona tras ocho días de paso obstaculizado, en los que el nivel bajó unos diez centímetros más.  

El buque de bandera liberiana Aristeas P había zarpado desde la terminal VI de San Lorenzo hace poco más de una semana y quedó varado a la altura de Fighiera, con 36 mil toneladas de pellets de soja. Hasta anteayer el buque estaba obstruyendo la salida de 13 barcos que esperaban en el puerto de San Lorenzo, otros 8 anclados en Rosario y 20 que esperaban en los pontones del Río dela Platapara ingresar aguas arriba. A ellos se sumaron otros ocho en las últimas horas. Según estimaciones privadas, son al menos dos millones y medio de dólares las pérdidas –sólo contabilizando coste de los buques cargados que no pudieron salir en más de una semana– sin sumar a ello derechos de exportación y otros gastos, como el tiempo de espera de los camiones que transportan cereales a puerto, también varados, pero en tierra.

Patrocinadores

Auspiciantes