A pocos meses de anunciar la construcción de dos puertos multipropósito en Zárate y en Ramallo, el operador portuario Ponal Terminales Portuarias (PTP Group) informó que se encuentra en estado avanzado la ampliación de sus facilidades portuarias en Nueva Palmira, Uruguay, y brindó detalles acerca de Zofravilla, la zona franca de Villa Constitución, Santa Fe, de la que ganaron la licitación como integrantes de una UTE junto con empresarios del sector granario y financiero de Rosario.

Guillermo Misiano, director de PTP, destacó algunas de las características del proyecto que lleva años de espera, y que arrancó con un primer llamado a licitación en 1994, luego de que Acindar le vendiera un terreno lindero a la provincia, a un precio muy conveniente, para que se construyera allí una zona franca, proyecto que no prosperó.

"La zona franca es un negocio similar al de un depósito fiscal, pero con algunas ventajas más. Hoy la única que funciona verdaderamente es la de La Plata. La diferencia es que a la de Villa Constitución cuenta, además de la habilitación comercial, un permiso industrial para transformación de mercaderías, algo que La Plata no tiene", indicó Misiano.

Zofravilla aprovechará la posibilidad de construir un puerto en la zona franca sobre la hidrovía, aprovechando la profundidad que el río tiene en la zona para operaciones oceánicas. "Allí el negocio cambia totalmente y pasa a competir directamente con la zona franca de Nueva Palmira", explicó.

El concesionario apostará al negocio de transbordo de cargas fluviales de países como Bolivia y Paraguay. Y el valor agregado será la transformación de los granos en la zona franca.

"Prevemos que las aceiteras y los molinos serán las principales industrias que se radicarán allí, para aprovechar los mayores plazos de permanencia que ofrece el enclave de zona franca", amplió.

El concepto en sí de zona franca no cuenta con el beneplácito de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), sobre todo porque, justamente, permite dilatar el pago de impuestos. No obstante, recientemente el sector celebró el gesto de la eliminación de la doble DJAI que pesaba sobre las zonas francas y que, por ejemplo, en La Plata, provocó una caída de la actividad en 2012 del orden del 80 por ciento.

A partir de este nuevo contexto, Zofravilla apuesta a "administrar la zona y operar el puerto multipropósito, que prevé movimiento de contenedores", en un frente de muelle de 700 metros, suficiente para trabajar con dos Panamax cómodos.

"Vamos a operar graneles sólidos y líquidos, desde mineral de hierro y arrabio hasta cereales, maíz y combustibles. La opción de zona franca será muy atractiva para posicionar graneles y, de esa manera, favorecer el financiamiento de los operadores", destacó el empresario.

El primer paso será que la UTE (integrada por PTP, Cereales del Sur, Red Flint Warrants, Worcap y Martín González) se convierta en una sociedad anónima para, una vez culminados los trámites legales, arranquen las obras civiles.