Ricardo Raúl Roman, empresario argentino con más de cincuenta años de trayectoria en la actividad logística, portuaria y de proyectos, brindó su punto de vista con respecto a la reciente sanción de la Disposición 0584, emanada de la Subsecretaria de Puertos y Vías Navegables de la Nación a cargo de Horacio Tettamanti, como delegado natural en el área por parte de Ministerio del Interior y Transporte. Por dicha norma, se establece el diseño de un nuevo canal de acceso a aguas profundas que llegará a Puerto La Plata, Dock Sud y Buenos Aires.

¿Qué opina de los fuertes comentarios de medios locales y del Uruguay con respecto a la polémica desatada por la disposición mencionada?

Son lógicos y esperables, para Uruguay, porque se le diluye la ventaja que significa que pase el canal a poca distancia de su puerto principal de contenedores (Montevideo). La construcción de una salida al mar alternativa a la existente, le hace pensar que perderá su primacía en las cargas de transbordo.

Con respecto a la carga originaria de nuestro país en tránsito con destino al exterior las autoridades nacionales pretenden recuperar las propias cargas que mueve la Argentina por sus principales terminales portuarias y por ende aumentar el trabajo para nuestros operadores portuarios. Para ello están adecuando las normativas aduaneras, y habilitando a los barcos de origen extranjero a que puedan realizar estos tránsitos de cabotaje. 

¿Qué beneficios traerá esta nueva traza?

Un tema importante a considerar es que el diseño de esta nueva hidrovía a aguas profundas que llegará a Puerto La Plata, Dock Sud y Buenos Aires trae el beneficio y las facilidade3s para que los buques portacontenedores de última generación puedan navegar con más calado y mayor seguridad y por ende entrar como salir con cargas completas.

Si la profundización prevista llega a los 40 pies, este mayor calado en la hidrovía mejorará notablemente la capacidad de carga de los buques “bulk carrier” que se utilizan para la importación de carga general y minerales, y la exportación de minerales, cereales y productos oleaginosos. Estos buques hoy deben completar carga en “zona común” o en otros puertos del atlántico sur. Hay que considerar que cada pie adicional de calado que se pueda lograr significa no menos de 5.000 toneladas de carga útil a transportar (minerales o productos o subproductos oleaginosos).

Conexión al mundo

Este proyecto que se menciona en la disposición del Subsecretario de Puertos y Vías Navegables, es de carácter histórico para la Argentina, ya que nos permitirá conectar nuestras infraestructuras portuarias al mundo mediante una vía de agua profunda. El proyecto prevé alcanzar en la obra base los 12 metros de calado. Además –y no es un dato menor- desde hace mucho tiempo no se manifiesta una vocación de las autoridades nacionales de emprender una planificación ordenada tendiente a mejorar la infraestructura de navegación con alcance al corto, mediano y largo plazo.

Complementariamente debemos tener en cuenta que todo lo que hagamos en este sentido, ayudará a aprovechar mejor la capacidad instalada en los puertos argentinos, redundando en mayores índices de capacidad, productividad, reducción de los costos de los fletes marítimos internacionales y la creación de más y mejores fuentes de trabajo. 

Fuente: T&C, en cronista.com